MAGDALENAS DE CACAO CON HARINA DE AVENA (COOPERATIVA "PEQUEÑAS DELICIAS")

 

INGREDIENTES

(para 4 unidades)

80 gr. harina de avena

40 gr. yogur griego

1 huevo

20 ml. bebida vegetal

40 ml. AOVE

10 gr. de cacao puro

1 cucharada de levadura

edulcorante (opcional)

ELABORACIÓN

Empezaremos mezclando la harina de avena, el cacao (es importante no echar demasiado cacao puro, ya que es muy fuerte) y la levadura y removemos hasta que quede bien homogéneo.

Por otro lado, en otro recipiente vamos a mezclar el yogur, el huevo y la bebida vegetal, ademas del AOVE. Nosotros hemos separado las claras para montarlas un poco y añadirla después, con objeto de que salgan más esponjosas.

Luego mezclamos todos los ingredientes sólidos con los líquidos, y terminamos de añadir las claras algo montadas, removemos con cuidado de manera envolvente.

Vertemos la masa en los moldes de magdalenas aptos para el horno, que previamente habremos engrasado con un poco de AOVE

Precalentamos el horno a 200º C por arriba y abajo, y si tiene con ventilador. 

Metemos nuestras magdalenas y cocinamos de 12 a 15 minutos.

Es importante no abrir el horno durante la cocción, para no afectar a la temperatura.

Una vez enfriadas, retiramos del molde y servimos.

REDACTADO Y FOTOGRAFIADO POR A.M.M.A

 ¿Cómo se transforma el cacao en chocolate? 

¿Cómo se transforma el cacao en chocolate? Desde luego, hay un largo proceso para pasar de la planta del cacao a esas deliciosas tabletas de chocolate que tanto disfrutas. ¿Sientes curiosidad por saber cómo se llega a ese resultado? ¡Vamos a resumirte el proceso en este artículo!

Empecemos con el tratamiento del grano.

Evidentemente, el primer paso lo hacen nuestras cooperativas al recolectar el cacao de la planta y seleccionar los granos más adecuados para esta función. Lo siguiente es quebrar el cacao y fermentar las semillas durante entre 5 y 7 días para que salgan todos los aromas naturales.

Después, se procede a secar los granos y a seleccionar cuáles van a ser tostados. Una vez estén los granos tostados, se descascarillan para que quede solo el contenido que va a ser molido para conseguir, por fin, el chocolate.

Y desde aquí… ¿cómo se consigue el chocolate?

Durante el proceso de molienda, se obtiene licor de cacao o pasta, que luego se prensa. Al prensar, es cuando se extrae manteca de cacao -que es la parte líquida- y torta de cacao -que es la parte sólida-.

Luego habrá llegado el momento de empezar a mezclar el licor y la manteca de cacao con todos los ingredientes para hacer el chocolate. Se usará vainilla o azúcar, para dar cierto punto de dulzor, y leche en polvo si es que queremos elaborar chocolate con leche. Hemos de tener en cuenta que en este punto la pasta todavía será granulada, por lo que deberá pasar por una moledora de cilindros para obtener una masa más homogénea.

Posteriormente tenemos el proceso de conchado, durante el que el chocolate se trabaja durante días en las cavas para lograr esa textura suave que buscamos. En primer lugar, tenemos el conchado en seco: aquí se busca la máxima fricción para eliminar ángulos y rugosidades no deseados. Luego se hace el conchado líquido en el que se agrega manteca de cacao y un emulsionante natural. Durante todo este proceso, la pasta se mantendrá a una temperatura de entre 60 y 80 º.

Por último, se temperará -se calienta para hacerlo pasar de estado líquido a sólido- y moldeará hasta dar con la conocida tableta de chocolate.

Como ves, el proceso no es simple, pero, sin duda, ¡merece la pena! Ahora que ya sabes cómo se transforma el cacao en chocolate, hemos de preguntarte… ¿cuál es tu chocolate favorito?